La oscuridad se cierne a tu alrededor, una tenue luz al final del pasillo, avanzas y escuchas lejanos lamentos y ruidos sordos. Alcanzas la siguiente esquina y más oscuridad, pasillos, pasillos y aullidos de dolor y golpes mecánicos al fondo de la mazmorra.
Un golpe seco cierra el paso tras de ti, solo queda avanzar para salir de esta extraña locura, sombría y siniestra. Un salón se abre frente a ti, algo que parece una persona o lo que queda de ella convulsiona sobre una mesa oxidada y goteante. Unos cuerpos deformes se encuentran sobre lo que queda de aquella vida dándose un macabro